Thursday, August 06, 2015

E-pasaportes: ¡le sabotean presidente Humala!

Señal de Alerta
por Herbert Mujica Rojas
7-8-2015

E-pasaportes: ¡le sabotean presidente Humala!

El jefe de Estado, Ollanta Humala, subrayó en varias oportunidades que el empresario nacional no "apuesta" (creemos se refirió a arriesgar e invertir), en el país. Tengo la viva impresión que se equivoca, al menos en un caso puntual que conozco al detalle y en el cual sus colaboradores literalmente le sacan la vuelta y permiten que se aborte un concurso como el acontecido, pocos días atrás, en el Ministerio de Relaciones Exteriores y en el caso de los pasaportes electrónicos o biométricos.

A fines de este mes en Colombia, se emitirán los pasaportes electrónicos que facilitarán a los naturales del país norteño, de usar la exoneración de la visa Schengen y entrar a las naciones que conforman la Comunidad Europea. Vergonzosamente, en Perú no se podrá hacer lo mismo porque fuerzas extrañas foráneas y criollas, simple y llanamente tumbaron el proceso de julio que se llevaba a cabo en Cancillería.

La gestión diplomática y de Estado que coloca a Colombia en el marco de la exoneración para sus ciudadanos de la visa Schengen es exactamente igual a la que siguió Perú con la Comunidad Europea. Debe notarse que mientras que allá ya están anunciando el uso del pasaporte electrónico, en nuestro país, aun seguimos en pañales y con la preocupación de dejar en mal pie a Cancillería y al mismo gobierno peruano por tanta y bárbara ineptitud burocrática.

No es ajeno al presidente Humala que su administración planteó desde el 2013 la modernización de los pasaportes y puso a trabajar a la Superintendencia Nacional de Migraciones con esa loable ambición. Hemos dado cuenta in extenso de las ridículas contradicciones, marchas y contramarchas, dimes y diretes, ineficiencias y retrasos en que incurrió esa dependencia, con tal mala suerte que hasta ahora no hay ¡nada de nada!

¿Ha informado al mandatario Humala el Superintendente de Migraciones, Boris Potozen, que una empresa local, a su costo, riesgo y prestigio, ofreció de manera gratuita, la confección de 10 mil pasaportes electrónicos? A eso llamo un gesto interesante, constructivo y, sobre todo, de inversión de tiempo, materiales y dinero. No compromete a Migraciones, pero sí da una idea de la capacidad instalada y eficiencia de una firma peruana. Decir, por tanto, que no ponen el pecho, deviene en una imprecisión más o menos atroz.

Si el señor Potozen no transmitió y se guardó la oferta, entonces, como lo mostramos semanas atrás, adjuntaremos la carta puntual que hizo la empresa, para que se acuerde que con estas cosas no se juega y que hay que tomar las responsabilidades en serio. Sin embargo hay que preguntarse, de ser el caso, ¿con qué derecho o supuesta sabiduría esconde las comunicaciones Potozen?

Más aún. Quien gane la buena pro para la elaboración descentralizada del pasaporte electrónico NO recibirá un solo dólar , US$ 1, hasta que entregue los lotes de productos.  En buen castellano, esta operación por varios millones de dólares, tendrá que ser financiada, como dicen las bases, con el dinero de la empresa. Firma que tenga la responsabilidad arriesga, invierte y sirve al Perú. El asunto de rosado, al estilo de las licitaciones con nombre y apellido, con dedicatoria, no tiene nada. 

Entonces ¿cómo es que no invierten o arriesgan las empresas peruanas?

En cambio, la desnacionalización de la industria peruana, en el rubro específico del pasaporte electrónico, fue alentada por los funcionarios del gobierno del presidente Humala vía la Superintendencia Nacional de Migraciones y el Ministerio del Interior que se empeñaron en hasta 5 estudios de mercado para descubrir que la opción "de gobierno a gobierno", era un genuino disparate y para concluir que éste NO aportaba ¡ninguna ventaja al Estado peruano! El veredicto fue inobjetable: ¡tendrá que hacerse el pasaporte electrónico en el marco de la ley de contrataciones del Estado!. ¿Cuánta plata de los contribuyentes se malgastó en estas correrías absolutamente improductivas?

El pasaporte electrónico debiera ser mirado con ojos atentos por la administración del presidente Humala. Hasta hoy los funcionarios que han pasado por la Superintendencia Nacional de Migraciones desde el gris y cuasi olvidado Edgar Reymundo, a la fecha, con Boris Potozen, dejan mucho que desear. Lamentable que de la ineptitud manifiesta de gente pagada por los ciudadanos, sean éstos los perjudicados porque de no tenerse pasaporte electrónico, tendrán que seguir honrando los cientos de euros por la visa Schengen. ¡Qué barbaridad!

Por último, considero que en este rubro puntual, sí hay empresas que arriesgan e invierten seriamente en infraestructura, en entrenamiento especializado de personal, en software y en hardware con tecnología de punta y de acuerdo a los más exigentes requerimientos internacionales.

Y el presidente Humala debiera poner en la congeladora o separar a muchos de sus colaboradores que son los genuinos obstáculos para que en este campo no estemos contando ya con el pasaporte electrónico.

¿Por qué no va usted mismo señor presidente Humala y comprueba cómo la industria peruana sí está lista para hacer el pasaporte electrónico como se anunciara desde febrero del 2014, sin que la Superintendencia Nacional de Migraciones o el Ministerio del Interior dijeran chis ni mus? ¡Que le muestren la maquinaria, local, plana mayor y el conjunto de trabajadores calificados que laboran enalteciendo la capacidad nacional de una peruanidad sin tachas! ¡Al toro por las astas y que NO le sigan saboteando lo que podría ser un éxito para el Estado peruano bajo su administración!








Haya y la politología criolla

Haya y la politología criolla
por Pedro Godoy; profe@cedech.cl

2-8-2015

“El antimperialismo y el APRA” de Víctor Raúl Haya de la Torre es un clásico de nuestra politología. Cuando digo “nuestra”, obvio, aludo a Iberoamérica concebida como Patria Común. Constituye tal texto un desmentido rotundo a quienes, ubicados en la barricada herodiana, proclaman que padecemos de esterilidad doctrinaria. Tal denuncia la formulan para legitimar plagios de  teorías exóticas y trasplante de experiencias forasteras. Estas –a veces- en las remotas patrias donde son engendradas, ya han sido superadas por la bullente realidad. Otra carga negativa es que contribuyen a vulnerar el ethos nativo acentuando un proceso desnacionalizador que favorece la penetración imperialista.

La  obra  brilla con luz propia pese a los virajes del autor y las volteretas de quien hoy se proclama discípulo y fuera Presidente del Perú. Pocas veces un volumen reducido en páginas contiene tan alto número de enfoques originales, de interpretaciones lúcidas y anticipaciones atrevidas. Se publica en Santiago de Chile en 1936. Hasta entonces la nación iberoamericana carecía de una teoría orgánica de la unidad de la veintena de repúblicas provincianas. Estas –como se sabe- la miopía de las oligarquías lugareñas y la codicia metropolitana las precipitan al desmembramiento, la pobreza y la desidentificación. El autor rescata el programa de los libertadores y proporciona textura de militancia a las intuiciones de José Vasconcelos y a las precursoras tesis de Manuel Ugarte así como a la insurgencia reformista de la Universidad Nacional de Córdoba.

Hay quienes juzgan añejo el texto. Estiman que 1936 es el paleolítico. Estiman pasados de moda incluso a Laski, Popper y Marcuse. Habrá que extirparles el snobismo manifestándoles que “La República” de Platón es del siglo V a C, Tomás de Aquino teoriza en el XIII, Maquiavelo en el XVI, Smith en el XVIII. en el XIX Marx igual que León XIII. Son los mismos que pese a proclamarse “tomistas” o “neotomistas”, “nacionalistas”, “liberales”, "marxistas" o “socialcristianos”  estiman que Bolívar es sólo un militar. Como tal incapaz de generar doctrina política. Posee dos factores adversos: uno, es personaje del ayer y no "moderno". Eso se disculpa sólo a los “clásicos” anotados porque son europeos y, por ende, inmortales. El otro, es venezolano y la politología para los cipayos sólo florece en el Viejo Mundo y será siempre, para el Nuevo, artículo importado.

“El antimperialismo y el APRA” es vivero fecundo de ideas y actitudes desplazadas a través de canales diversos. Es cierto que su autor animó la iniciativa de constituir Partidos Apristas en cada república. En los 30 se organiza el APRA cubano cuyo órgano de expresión es la revista “Atuey”, en Chile influye sobre el PS a través de Eugenio Matte Hurtado y también se funda el APRA argentino. Sin embargo,  –por motivos que se ignoran- Haya y su entourage opta por vigorizar sólo el Partido Aprista Peruano. Las tácticas para alcanzar el poder van de la revolución popular al complot castrense pasando por procesos electorales en que siempre la oligarquía le birla la victoria. Con Alan García llega a Casa de Pizarro, pero ya es una caricatura. Un abismo separa a Gorbachof de Lenín, a Chiang Kai Shek de Sun Yan Sen. Igual ocurre ente el I Víctor Raúl y el Alan de hoy.

El aprismo si bien en lo político institucional se repliega a lo exclusivamente peruano, en lo ideológico influye poderosamente. Sin duda, sus tesis palpitan en "el pequeño ejército loco" de Sandino, en la 3ª Posición que Perón  intenta cristalizar en el ABC y en los EEUU andinoplatenses, en el arevalismo impulsor de la integración de Centroamérica, en los postulados primigenios de la revolución que impulsa el MNR en Bolivia, en el elan bolivarista del fidelismo de la hora prima, en la pugna de la Legión del Caribe contra los déspotas locales, en el impulso dado por Eduardo Frei Montalva al Pacto Andino antes que lo sedujera Kennedy y lo abrumara el vuelco de La Habana a un marxismo extranjero, en las obras –entre otros- de Joaquín Edwards Bello y Felipe Herrera...

Haya siempre reivindica los afluentes nativos que generan sus textos perdurables y su otrora pujante movimiento. Maneja una frase que cito de memoria: el APRA posee como Padre: el México revolucionario; Madre, la Córdoba insurgente de 1918 y el Espíritu Santo fluye del solemne Cusco, corazón del Incanato. De los dos primeras fuentes proviene la vocación bolivariana –Haya prefiere manifestar “indoamericana”- y la alusión a lo incaico generaría la utopía de un mundo con justicia social y vocación continentalizadora. De esto derivan no pocos analistas una vertiente indigenista. Sin duda la hubo, pero también se exalta lo afro, lo asiático y lo hispano. En lo racial, promociona la mestizofilia.

En lo sociológico se opone al monoclasismo que, como dogma, impone la COMINTERN. Sostiene: “Los países nuestros son preindustriales. El proletariado fabril a la europea, inexistente. Las muchedumbres campesinas constituyen latente fuerza revolucionaria y en las capas medias  se reclutan líderes del proceso libertador. En consecuencia el APRA es tan multirracial como policlasista”. Tempranamente Haya rechaza la tutoría del Kremlin. Difunde la consigna “¡Ni Washington ni Moscú, sólo el APRA salvará al Perú!”. Con ello se anticipa a Tito, Mao o Togliatti y, por cierto, al tardío eurocomunismo de Berlinger, Marchais y Carrillo. Cosecha la acusación de"socialfascista" con que también se etiqueta al PS de Chile encabezado por el coronel Marmaduque Grove. Es el momento en que la excomunión de los sovietólatras se expresa en el opúsculo “¿Qué es el ARPA?” (sic) de Julio Antonio Mella. 

Al exaltar el Tahuantinsuyo los adversarios creen ver la misma inspiración de Mussolini respecto a la Roma imperial. En la milicia aprista –apodados “búfalos”- imaginan “camisas pardas”. En la estructura piramidal, verticalista y compartimentada sostienen se esconde el totalitarismo. El mismo Jorge Abelardo Ramos –no sin ocultar simpatía- aludía al stalinismo incaico que representara el autor de “El antimperialismo y el APRA”. Este logra –algo poco frecuente- ser, de modo simultáneo, ideólogo y conductor de masas. El deterioro de su doctrina comienza con su deceso en 1979. No obstante, ya durante la II Guerra Mundial se desplaza a una postura “aliadófila”argumentando la urgencia de cooperar con la victoria de las democracias sobre el nazifascismo. Luego se adscribe a la II Internacional y el PAP se hace socialdemócrata. Alan García administra aquella "cuesta abajo la rodada” .

Al cumplirse el centenario del estallido de la Guerra, en 1979, CEDECH proclama a Víctor Raúl postulante al Premio Nobel de la Paz. Sin duda una manifestación opositora no armada contra el régimen del general Pinochet. Simultáneamente, no sin sacrificios pecuniarios y dificultades con la censura, se reedita la obra magna que comentamos. Recuerdo que se hizo un canje semiclandestino de cien ejemplares que viajan a Buenos Aires y la retribución son cien de “Historia de la nación latinoamericana” editada por Peña y Lillo. Mientras “El antimperialismo y el APRA” –hoy- continúa resplandeciente, la estructura partidaria generada con tanta creatividad por Haya apenas si respira asfixiada en el sarcófago de una democracia inspirada por el modelo neoliberal.

Prof. Pedro Godoy P.
Centro de Estudios Chilenos CEDECh

www.premionacionaldeducacion.blogspot.com