Elite financiera maneja el mundo
por Luis
Bravo Villarán; luisbravo1944@gmail.com
10-4-2018
En el mundo y
más en América, ha quedado demostrado que tanto el sistema neoliberal como el sistema
socialista han fracasado y sucumbido a la corrupción.
Pocos saben
que ambos sistemas son manejados por la élite financiera que desde el siglo
XVIII se fue empoderando a través de controlar prácticamente todos los bancos
centrales, comenzando por Alemania, Inglaterra, Francia, Italia, Austria,
EE.UU., Rusia (luego de la revolución bolchevique) y así el 99% de los países
incluido el Banco de China; y claro también el BCR peruano que se crea por ley
en 1922, pero que es coordinado de afuera colocando los directorios a
discreción. Este movimiento elitista financiero, es el que se conoce como el Nuevo
Orden Mundial–NOM, que incluso ha sometido a la Iglesia Católica.
El NOM maneja
las llamadas ‘derecha’ afines al (dizque) “libre mercado”; pero también maneja
las llamadas ‘izquierda’ a través de ONGs y fundaciones que aportan para
movilizar las masas izquierdistas a voluntad de acuerdo al vaivén político y
según su conveniencia, donde el más notable operador es el conocido George
Soros, que en Perú financió (todos lo saben) la Marcha de los 4 Suyos y
recientemente las marchas anti-K para poner a su agente PPK en el poder. Si
esto no es claro para los peruanos, no conocemos la realidad de cómo se mueve
el mundo.
Hoy contra
todo pronóstico mediático, cayó el gobierno de PPK, sometido a ese poder y del
que fue agente desde décadas atrás. Pocos saben que PPK representó en 1988 a
los EE.UU. en el Grupo Bilderberg (NOM) y que formó parte del Consenso de
Washington en el que se basó la privatización en el Perú de los 90, cuando el
referido agente participó activamente en la privatización del sector energía que
culminó exitosamente la entrega del gas peruano (Camisea) a intereses
norteamericanos y chilenos, entre otras decisiones dirigidas desde el poder de
la élite financiera y que culmina concediendo la exploración-explotación del
petróleo peruano en el zócalo continental a intereses ingleses afines a su
tendencia. La historia a partir del año 2000 es bien conocida. El piloto automático, (PPK), participó y manejó
a los sucesivos gobiernos corruptos del presente siglo, hasta que llegó (error
estratégico) a la presidencia de nuestro país.
Gracias a ese
error cayó el velo y estamos frente a una realidad: el sistema fracasó y esta es la oportunidad del gobierno que
constitucionalmente ha tomado la posta.
Si el
gobierno de Vizcarra tiene éxito, habremos aprovechado esta oportunidad única.
Para ello, Vizcarra debe constituirse en un gobierno anti-sistema de centro y
llegar con un Perú diferente -en desarrollo- al año 2021.
Si fracasa
por continuar el sistema que deja PPK y los anteriores gobiernos corruptos, se
habrá perdido esta oportunidad única
y vendrá un gobierno anti-sistema de izquierda radical (incendiaria), probablemente
liderado por algún ex militar, que desparecerá al sistema (actual), incluyendo
a las pretensiones izquierdistas actuales (que, como es claro, sin probablemente
saberlo, han formado parte del sistema) y de paso difuminará al Perú pero
-lamentablemente- gozará de aceptación popular, hasta que nos lleve a una
situación peor que la de Venezuela de Maduro.