Urgente remoción de
Chlimper del BCR, flotación sucia y tipo de cambio
por Germán Lench Cáceres; germanlench@gmail.com
23-11-2018
Nombrar un político
como miembro del Directorio del Banco Central de Reserva era un asunto
absolutamente inconveniente.
En el artículo 11°
de la Ley Orgánica del BCR se establece
que sus directores deben tener reconocida competencia y experiencia en economía
y finanzas. No representando a entidad o interés particular alguno y justamente
se nombró a un político José Chlimper secretario del partido político Fuerza
Popular quien afronta problemas judiciales.
De lo afirmado a la fecha, el Directorio del
BCR no ha efectuado ningún pronunciamiento, su actual presidente Julio Velarde
Flores, en aquella oportunidad respaldó el nombramiento de Chlimper, al asegurar que
reunía los requisitos y que "no había peligro alguno", decía: "ya
ha sido director antes, no es experto en el tema monetario. Si hay alguna
pregunta con respecto a que pueda cambiar la política monetaria, esa inquietud
no tiene fundamento alguno. ¿Qué peligro puede haber? Ni que fuera una marioneta. Reúne
los requisitos".
Pero lo que siempre generó duda era qué
intereses representaba este empresario en el Directorio del BCR, claro al
parecer era para defender los intereses de los empresarios exportadores e
intervenir para que el banco compre dólares como consecuencia del exceso de
oferta y el tipo de cambio no baje para que los exportadores no pierdan competitividad
en sus negocios privados.
Su
evidente interés era obligar al BCR a aplicar el tipo de cambio flexible sucio que es un régimen cambiario
en el que el banco puede intervenir ocasionalmente para conducir el valor de la
divisa hacia una dirección u otra (flotación
sucia).
En la práctica, lo
habitual es lo que se denomina flotación
sucia, es decir, que el BCR interviene para que el tipo de cambio se adecúe a los
niveles deseados, comprando o vendiendo divisas contra su moneda nacional, si
se desea que ésta no se deprecie sustancialmente.
De esta manera y en
términos de impacto sobre la población, los principales objetivos del BCR son dos:
mantener la estabilidad monetaria (no hay peor daño que la inflación) y evitar
fluctuaciones bruscas en el tipo de cambio.
Este director del BCR debe ser removido
inmediatamente por el prestigio y transparencia de dicha institución, es
importante tener en cuenta la imagen, “Un director del Banco Central es necesariamente un
funcionario público de acuerdo a la propia Constitución; en ese sentido, debe cumplir con todas las
normas que les son aplicables a los funcionarios públicos, entre ellas la Ley N°
27815, Ley del Código de Etica de la Función Pública”.
Evitemos la
turbulencia e incertidumbre política que viene generando desconfianza y
contaminando las expectativas de inversión a mediano y largo plazo de la
pequeña y mediana empresa en el corto plazo, evitemos afectar el ánimo
empresarial de las inversiones necesarias para generar un crecimiento del PBI
nacional al 4% anual.