Informe
Señal de Alerta-Herbert Mujica Rojas
5-8-2023
¿Sociedad silenciosa o amordazada?
https://senaldealerta.pe/sociedad-silenciosa-o-amordazada/
La prensa concentrada,
obvio reiterarlo, centraliza “noticias” e impone “lecturas” a sus clientes. Los
cuernos entre famosos suelen ser materias sociológicas de discusión y figuran
siempre con fotos en primera plana.
Se destacan titulares
cuando sus editores así consideran que las “noticias” merecen ese privilegio y se
disimula y esconde el contenido, para otorgar resúmenes parciales según la
ocasión. Cuando calla, también lo hace en 7 idiomas o relega alguna nota en
pocas líneas y en páginas interiores.
Esta prensa monopólica da
mayor importancia a la lectura de sentencia de los delincuentes y no informa
nada de los atropellos que sufrieron en varias partes del país los que
protestaron en julio.
Más que silenciosa, la
sociedad peruana está amordazada porque ¡ni pagando! puede el público destacar
o noticiar sobre los abusos cotidianos que padece a manos de malas autoridades
insolentes cuando no coimeras en la administración pública.
Compruébense las portadas
o llamadas de los miedos de comunicación. Del sainete ridículo a la violencia a
tiros y la contabilidad diaria de gente caída a balazos en enfrentamientos de
una violencia denigrante.
Un canal de televisión
pasó un programa con niñas exhibiendo sus figuras en ropa interior. Como suele
ser común, el escándalo aconteció después cuando pudo haberse evitado semejante
barbaridad.
¿Ha leído a los
intelectuales consagrados, por esa misma prensa concentrada, cuestionando el
mutismo de la gran prensa? Obvio que no. Si cruzaran la delicada frontera entre
decencia y perversión, más réditos da estar en el lado oscuro que en el
decente.
La sociedad silenciosa y
amordazada se distrae en una memoria de límites ruines porque los extiende al
plazo de apenas diez años. Ubica como pretexto a un pobre diablo nipón que
regaló el país (entre 1990-2000) con privatizaciones y concesiones con nombre
propio y con las que se hicieron multimillonarios muchos sinverguenzas que hoy
ocupan puestos de alto nivel en la burocracia, ministerios, prensa, etc.
Eunuca y malhadada, la
sociedad silenciosa y amordazada, retoza con minucias, evita los grandes temas
del debate nacional y repite monsergas de hace 40 años. ¡Cómo si la historia no
castigara a quienes no aprenden de sus errores!
¡Y hoy continuamos camino
al abismo desorientado porque ningún alud de efímeras coyunturas económicas nos
va a sacar del fondo sucio de trampas y cohechos que una vez consumadas sólo
entran en erupción en millones de quejas. Y de resignación, letanía que fue inventada
aquí.
Hay algunas taras
enquistadas en el alma peruana. Se cree que la diplomacia y las relaciones
exteriores sólo pueden ser coto de caza exclusivos de los señorones de Torre
Tagle. Pero en 200 años se han encargado de dar serias muestras de un enfermizo
e irreductible derrotismo y capacidad de fracasos. El vulgo piensa en los
fracasos del fútbol cuando tiene en Relaciones Exteriores a una de las
instituciones más cuestionadas de toda la historia republicana.
¿Qué espera Cancillería
para motorizar una reingeniería radical en su institución, plagada de
apellidos, de dinastías de abuelos a nietos, de elusión de quienes carecen de
color blanco en su piel y ojos claros? En ese ministerio nunca se castiga a las
vacas sagradas que hacen ¡lo que les da la gana!
¡A otro perro con el
cuento del secretismo y la discreción y que los trapos sucios se lavan en casa!
¿No contempla el Perú entero el derrumbe irremisible de colectividades que
otrora fueran escuela y lección para la vida cívica y política? Hoy protestan
que les llamen organización criminal y no discuten el haber recibido dinero
sucio sino que en aquellos años ¡no era ilícito!
La sociedad silenciosa y
amordazada tiene pandillas académicas castradas porque sólo “producen” al
tintineo de los cheques direccionados para tal o cual sentido. Sólo hay
protestas de sesgo y con los amigotes que tienen que estar inscritos en las
nóminas de relacionados, de lo contrario “no existen”, no son “visibilizados”
como reza la huachafería de nuevo cuño que imponen prestidigitadores inanes y
entonces el mundo sigue girando en torno a la nada.
Y la nada es eso,
simplemente nada, entelequia, armazón de juguete, maire maire, cabellicos que
se lleva el aire.
Estas reflexiones apuntan
a sacudir la contemplación de muchos que quisieran hacer más y actuar con fe en
un Perú libre, justo, culto y libre. Se redactan como protesta y bandera y para
que las nuevas generaciones asuman respuesta a los desafíos.
El porvenir nos sigue
debiendo victorias. Hay que conquistarlas con denuedo de vencedores y coraje de
pioneros que miran el horizonte para 40 ó 50 años.