Informe
Señal de
Alerta-Herbert Mujica Rojas
7-5-2024
DGAC sigue ocultando auditoría FAA
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La auditoría extraordinaria a la DGAC (Dirección General de
Aviación Civil), realizada por la Federal Aviation Administration
estadounidense, semanas atrás, permanece bajo siete llaves, en el secreto más
recóndito y nadie, a excepción de Donald Castillo, conoce del asunto.
¿Ha insistido el canciller Javier González Olaechea en el
documento o está demasiado ocupado en sus promociones cinematográficas que dan
cuenta de visitas exploratorias, comunes y charlas protocolares absolutamente
inanes? De producirse un informe negativo, la categoría de nuestro primer
terminal aéreo podría rebajarse y ¡arrancan más líos que soluciones!
Según ha trascendido, hay
evidencias que el informe de la FAA concluye indicando que los inspectores peruanos
no son competentes, es decir que en estos últimos 10 años no han recibido
capacitación, por lo tanto no están en condiciones de certificar ni vigilar la
aviación nacional.
Con el propósito de mejorar la
capacitación de los inspectores peruanos el MTC hizo un convenio con OACI
(Organización de Aviación Civil Internacional), años atrás y recibe decenas de
millones de dólares. ¿Ha sido beneficioso ese acuerdo y a quién dan cuentas de
sus resultados?
La DGAC, ante un desenlace
negativo, desesperadamente dispuso la no atención de ningún requerimiento de
los operadores aéreos, porque todos están ocupados “estudiando” y en el
esfuerzo de la hora nona de evitar que la FAA nos degrade de categoría a nivel
del país, lo cual nos convertiría en un paria entre los demás países de la
región.
Un dato que demuestra cuan confundidas
están las autoridades del ramo: el señor Donald Castillo continúa como titular
de la DGAC y también integra el directorio de Corpac (Corporación Peruana de
Aeropuertos Comerciales). Conviene saber y de fuente oficial ¿está recibiendo
doble sueldo del Estado el señor de marras?
Si Perú es bajado de categoría
como país, todos los aviones que salgan de Lima hacia Estados Unidos podrían
tener inconvenientes o ¡simplemente estar impedidos de aterrizar en la nación
del norte!
El caótico desorden abarca
también al Aeropuerto Internacional Jorge Chávez cuya nueva torre de control y
II pista (con 650 metros menos), están no operativas desde octubre del 2023. Cuando
se le inquieren explicaciones a la concesionaria Lima Airport Partners, LAP,
por toda respuesta elaboran videos, charlas, textos sobre la Ciudad Aeropuerto.
Una nueva torre de control y
una pista recortada, entregadas con bombos y platillos, con ceremonia y
asistencia de la presidenta Dina Boluarte, no tiene 1 año ¡y están no
operativas! Debe ser un caso singular y espectacular en el mundo aeronáutico.
La concesionaria Lima Airport
Partners, LAP, hasta donde se tiene conocimiento, no ha pagado el seguro contra
terrorismo, US$ 200 millones, y cuyo incumplimiento es causal de rescisión del
contrato de concesión.
Pero ¡por supuesto! el MTC y
Ositran, DGAC y todo el resto de ministerios y funcionarios ¡calla en siete
idiomas, no protesta y que la propaganda con espejitos (como los que mostraban
a los pobladores latinos, los españoles) persista deslumbrando y asombrando.
Los siguientes datos dan
cuenta de lo que supuestamente hace OACI beneficiada con millones:
La resolución ministerial
0439-2023-MTC/01 del 24-4-23 autoriza a suscribir acuerdos de cooperación
técnica con la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).
El objeto de la transferencia es
financiar la ejecución de la Adenda N° 01 al Acuerdo de Asistencia Técnica N°
PER/17/801, titulado “Fortalecimiento de la aeronáutica civil del Perú para el
desarrollo aeronáutico y mejora continua de la seguridad operacional”.
La remesa a la Organización de
Aviación Civil Internacional (OACI), es por la suma de S/ 29’535,199, y se
realiza con cargo al Presupuesto Institucional del Ministerio de Transportes y
Comunicaciones para el Año Fiscal 2023.
El monto para el período 2017-2021
fue de US$ 51,987,651,00 y la suma para el período 2022-2026 asciende a: US$
62’125 242.95. Lo cual significa un
incremento de US $ 10’137, 591,95 con respecto al ejercicio anterior.
Ese
abultado monto del dinero de los contribuyentes peruanos que se da vía el MTC a
OACI, ¿ha significado mejoras comprobables y demostrables? Es un tema de
interés público.
Hay otra ominosa mudez, por incompetencia e
irresponsabilidad: las autoridades políticas se hacen las bobas. El dicho
jurídico recuerda que la ignorancia de la ley, no exime de su cumplimiento.
Mientras que otros periodistas callan con financiación, queda constancia que se
hacen, de frente y con todo, las denuncias.