Tuesday, April 02, 2019

Meritocracia y talento aún son sueños en Sunat


Meritocracia y talento aún son sueños en Sunat
por Germán Lench Cáceres; germanlench@gmail.com

2-4-2019

La presión tributaria del Perú fue 15% del PBI el 2017 y en América Latina 21%, por tanto se debe recaudar mayores ingresos tributarios.

Los impuestos financian el gasto público (educación, salud, saneamiento, sistemas de agua) y contribuyen a la mejora de la distribución del ingreso. Pero el nivel de ingresos fiscales peruanos es bajo y depende de la evolución de los precios internacionales. Ello representa una vulnerabilidad fiscal, dada la reducción que genera en la capacidad del Estado para brindar bienes y servicios y para aplicar políticas contracíclicas.

La clave es reformar el sistema tributario, las altas tasas en algunos impuestos, las exoneraciones y el alto grado de evasión que deben ser tratados mediante una política tributaria eficiente.

Hay que reducir la informalidad, combatir la subvaluación, contrabando, piratería y falsificación de productos, desaparecer los monopolios y oligopolios (eliminar las AFP´s).

La preponderancia de impuestos indirectos en la recaudación. Los impuestos directos (renta y propiedad) contribuyen a disminuir la desigualdad en la distribución de ingresos.

Hay altos niveles de evasión tributaria, sobre todo en el impuesto a la renta y el IGV. La informalidad afecta al 75% de la Población Económicamente Activa (PEA), el 95% de las MYPES es informal y hay más de 3 millones de ellas.

La reducida base tributaria es por deducciones, exoneraciones que no contribuyen a la igualdad y regímenes especiales que promueven la evasión. La complejidad del sistema tributario, dificulta ampliar la base.

Otro aspecto es ¿qué hacer con los 13,000 trabajadores que tiene la SUNAT?.  La Ley N° 29816 de fortalecimiento de la SUNAT no dio facilidades para que un grupo de burócratas de dudosa competencia técnica colocaran esta institución en la necesidad de una reestructuración, en vez de cumplir con el propósito de “Elevar la recaudación en forma progresiva hasta un 18% del PBI”. La meritocracia y la gestión del talento humano, son aún sueños en SUNAT.
  
¿Se puede gobernar, redistribuir la riqueza y dar servicios donde el Estado, teniendo el monopolio de la fuerza (seguridad, defensa, justicia), no dispone de recursos?. Ante este panorama se tiene que recaudar más, por tanto se debe efectuar una reforma de tributos (Renta, IGV, Impuesto Selectivo al Consumo, Aranceles de Aduana) y simplificar las normas de recaudación.

La SUNAT tiene escasa predisposición para atraer nuevos contribuyentes, no reconoce los años de buen pagador ni sus mínimos derechos elementales.

Según la población la SUNAT, tiene inconvenientes burocráticos, con barreras irracionales; las personas y empresas dicen que la dificultad son las multas, costos elevados, la excesiva documentación,  la demora en trámites, la falta de uniformidad en los procesos y la mala atención.

El sistema tributario es traba al crecimiento económico, por tanto es necesario recurrir a una reforma: a) analizar las tasas impositivas, b) recomposición de las fuentes de ingresos tributario y c) aspectos administrativos de procedimientos con el objeto de simplificarlos, se quiere asegurar un incremento de la base tributaria, menor informalidad y evasión para mejorar la inversión e iniciativa empresarial.

Debemos lograr una política tributaria activa, con énfasis en la recaudación de impuestos directos, que baje tasas impositivas, amplíe la base tributaria y la reforma de la SUNAT.