Señal de Alerta
por Herbert Mujica Rojas
12-7-2021
¿Ha perdido la derecha el poder en Perú?
https://senaldealerta.pe/pol%C3%ADtica/%C2%BFha-perdido-la-derecha-el-poder-en-per%C3%BA
¿Siguen poniendo los bancos las tasas de interés más altas y
cobrando las más abusivas cuando de préstamos, tarjetas de crédito y en general,
en todas sus operaciones virtualmente saquean al cliente? La respuesta es un sí
categórico.
¿No han sido los miedos de comunicación los que han
albergado a los golpistas y sus “alegatos” de fraude, sin la más mínima prueba
y los que propagaron este sofisma porque no ganaron el 6 de junio? La respuesta
es un sí categórico.
¿No son los privilegiados importadores de mascarillas,
alimentos, insumos de toda laya, que “NO” deben producirse en Perú, los que
siempre ganan las buenas pro de las licitaciones que hacen múltiples ministerios?
Sí son ellos.
¿Importa a la derecha que la industria siga paralizada o
estancada, con cientos de miles de trabajadores impagos, sin trabajo y sin
tener que llevar el pan de cada día a sus hogares y no son ellos los que se
embolsican miles de millones de dólares con la miseria del pueblo que paga
todos los impuestos y que recibe migajas? No, no les importa nada.
¿No es la derecha económica y troglodita la que ha comprado
“operadores” (mercenarios) políticos y juristas capaces de afirmar bajo juramento
que en Perú llueve para arriba? Sí, ellos son.
Afirmar por tanto que la derecha golpista ha perdido el
poder en Perú, deviene en una imprecisión optimista, de alta teoría de lo
deseable pero algo lejana de la perversa realidad que consagra desigualdades
monstruosas en Perú. Me temo que en la interesante entrevista dada a Carlos
Bedoya por Franceska Emanuele, se desliza con imprudencia esta afirmación
deleznable. https://www.youtube.com/watch?v=E-56fW5jlNI
Decía Andrés Townsend Ezcurra y cuestionaba con severidad:
¿Qué conserva un conservador en el Perú?: ¿la desigualdad, el racismo, la falta
de educación, la orfandad de horizontes y la ausencia de un proyecto nacional
que parta de lo individual hacia el bien común y colectivo de la sociedad
peruana?
Si la derecha golpista careciera de poder, cuasi imposible
habría sido que levantara con la complicidad de los miedos de comunicación una
narrativa subversiva y fascista contra el dictado que nació de las urnas y que
consagró a Pedro Castillo como presidente del Perú.
¿Con qué autoridad moral Keiko Fujimori anuncia que no
“reconocerá” la proclamación presidencial de Castillo? Es ella quien tiene
sobre sí fallos penales de carcelería y el último fin de semana la justicia
embargó a su esposo, Villanela, terrenos comprados con dinero presuntamente
ilícito.
Los gonfaloneros de la derecha más reaccionaria y golpista
se barnizan de juridicidad y retórica intelectual para la emisión de sus
disparates. No son más que alfiles de un juego sucio que pretende conservar un
estado de cosas que, sin mayores variaciones, ha acontecido en Perú desde hace
200 años. ¡Los 200 años, el bicentenario, que unos cretinos dicen que es fecha
de celebración, cuando debía ser exégesis severa y corrección radical de
entuertos y desaciertos!
Las maravillas teóricas no se imponen a los dictados de la
realidad que es más fuerte que cualquier entelequia. Y esa lección no hay que
dejarla de lado, sin aquella, la fantasía se estrella contra lo fáctico.
¡Ataquemos al poder, el gobierno lo tiene cualquiera!