por Herbert Mujica Rojas
4-9-2009
La estupidez nuestra de cada día. Amén.
http://www.voltairenet.org/article161934.html?var_mode=recalcul
Dijo Albert Einstein: Dos cosas son infinitas, el universo y la
estupidez humana. No estoy seguro acerca del universo.
En la contraportada de su libro The Power of Stupidity, Giancarlo
Livraghi anota los siguientes conceptos:
La estupidez es la fuerza destructiva más grande en la historia de la humanidad.
No puede ser totalmente derrotada. Pero podemos hacer mucho para
reducir su daño y controlar su poder.
Cuánto más la entendamos, más podremos eludir y prevenir sus atroces efectos.
Pocos días atrás en La estupidez es democrática
http://www.voltairenet.org/article161860.html abundamos en sugestivas
cuanto que sugerentes consideraciones del autor italiano de quien
tomamos prestado algunas partes del capítulo 9, Tres Corolarios (op.
cit. http://gandalf.it):
"Tengo una señal de esperanza con cierta frecuencia, he detectado cuan
estúpido soy (o he sido). Esto indica que no soy completamente
estúpido.
Primer corolario:
En cada uno de nosotros hay un factor de estupidez, que es mucho más
grande de lo que suponemos.
Segundo corolario:
Cuando la estupidez de una persona se combina con la estupidez de
otros, el impacto crece geométricamente –i.e., por multiplicación, no
por suma- más allá de los factores individuales de la estupidez.
Tercer corolario:
La combinación de inteligencia entre personas diferentes es mucho más
dificil que la combinación de la estupidez."
Anota Livraghi, al final de este capítulo:
"Las comunidades con un notable factor de inteligencia están
capacitadas para una supervivencia de largo plazo, pero para que esto
ocurra es imprescindible evitar los potencialmente devastadores
impactos que tiene la estupidez compartida, que, desafortunadamente
causa más daño a las personas no estúpidas antes de auto-destruirse.
Otro elemento destructivo de la ecuación es que (como veremos en el
capítulo 10) la maquinaria del poder tiende a poner en lo más alto de
la pirámide a gente que se cuida de sí misma (y del interés de grupos
minoritarios) y desdeña el buen vivir del resto; y aquéllos, a su
turno, tienden a proteger la estupidez y ponen toda clase de escollos
al funcionamiento de la inteligencia como debiera ser.
Mientras que la influencia de la estupidez es peligrosa e insidiosa en
todas sus formas, mucho más daño causa la estupidez del poder."
Afirma de este libro, con no poca razón en sus palabras iniciales, Andrea Monti:
"I'm sure you –the reader- will be magnetized by the beauty of this
unusual contribution to the understanding of Human Nature".