Informe
Señal de
Alerta-Herbert Mujica Rojas
1-5-2024
¡Tribu de mentecatos!
https://senaldealerta.pe/tribu-de-mentecatos/
Si pudiéramos exportar como producto no tradicional, a los
mentecatos (bobos, fatuos, ignaros) que abundan sobre el territorio peruano,
mar, espacio aéreo, proyección desde el Atlántico y el trabajo científico en la
Antártida, en un ¡tris tras! paga nuestro país la deuda externa.
Una tribu de mentecatos, todos ellos con estancia precaria
en Plaza Bolívar y como homenaje al día de los trabajadores, fue noticiada de
un aumento de sueldo de algo más de S/ 3500 soles. El mínimo es más o menos la
cuarta parte.
O sea que los de la tribu exportable, en un santiamén se
embolsicarán 4 veces, lo que gana la mayoría de gente con un salario mas bien
diminuto y escuálido.
Mientras que el hombre o mujer comunes pelean en el fragor
diario que no da tregua, para llevar recursos con qué sufragar las necesidades
elementales de sus familias, los honorables (como los llamaba Manuel González
Prada), engordan la faltriquera y tendrán cómo atender sus vanidades.
La pluma atroz de don Manuel, les retrató mucho tiempo
atrás. Leamos para recordar algunos párrafos incendiarios que fueron publicados
en Los
honorables, Bajo el oprobio, Lima 1914:
“¿Qué es un Congreso peruano? La cloaca máxima de Tarquino, el gran
colector donde vienen a reunirse los albañales de toda
¿Ven ustedes al pobre diablo de
recién venido que se aboba con el sombrero de pelo, no cabe en la levita, se
asusta con el teléfono, pregunta por los caballos del automóvil y se figura
tomar champagne cuando bebe soda revuelta con jerez falsificado? Pues a los
pocos meses de vida parlamentaria se afina tanto y adquiere tales agallas que
divide un cabello en cuatro, pasa por el ojo de una aguja y desuella caimanes
con las uñas. Ese pobre diablo (lo mismo que sus demás compañeros) realiza un
imposible zoológico, se metamorfosea en algo como una sanguijuela que
succionara por los dos extremos.
El congresante nacional no es un
hombre sino un racimo humano. Poco satisfecho de conseguir para sí judicaturas,
vocalías, plenipotencias, consulados, tesorerías fiscales, prefecturas, etc;
demanda lo mismo, y acaso más, para su interminable séquito de parientes
sanguíneos y consanguíneos, compadres, ahijados, amigos, correligionarios,
convecinos, acreedores, etc. Verdadera calamidad de las oficinas públicas,
señaladamente los ministerios, el honorable asedia, fatiga y encocora a todo el
mundo, empezando con el ministro y acabando con el portero. Vence a garrapatas,
ladillas, pulgas penetrantes, romadizo crónico y fiebres incurables. Si no pide
la destitución de un subprefecto, exige el cambio de alguna institutriz, y si
no demanda los medios de asegurar su reelección, mendiga el adelanto de dietas
o el pago de una deuda imaginaria. Donde entra, saca algo. Hay que darle gusto:
si de la mayoría, para conservarle; si de la minoría, para ganarle. Dádivas
quebrantan penas, y ¿cómo no ablandarán a senadores y diputados?.”
¿Cuánto ha opinado el Congreso en
torno a la visita que está haciendo el canciller Javier González Olaechea en
China? ¿Saben los honorables de la tribu qué es lo que está ofreciendo el señor
de marras? ¿No es el Congreso el que debiera estar presente en la marcha de las
relaciones exteriores que no se puede dejar al libre albedrío de un gobierno
extremadamente débil y ayuno de respaldo popular?
¡Ah olvidaba que la tribu tiene su
propia agenda suicida y tiene como privilegio tirarse abajo a la Junta Nacional
de Justicia, a la ONPE y al Jurado Nacional de Elecciones! Para las damas y
caballeros legiferantes, poco importa el cincel quirúrgico que hay que emplear
con los chinos. Fundamental y vital es “construir” una política menuda, mínima,
intrascendente.
Nuestra tribalidad política se
resume en medidas cautelares, oficios, cita de artículos del código penal o
civil. Unos llaman delincuentes a los otros y aquellos retrucan. ¿No será que
ambos tienen razón en llamarse de tal modo? Es que la sartén le dice a la olla
¡no me tiznes!
El pasatiempo favorito de los
políticos, también tribus elementales, entrenadas en cómo extraer los jugos
dinerarios al Estado vía los diferentes gobiernos, hoy afinca en los
calendarios electorales. Las canonjías y premios equivaldrán a escaños en
diputados y senadores.
En homenaje a la mujer y hombres
que trabajan de sol a sol, con el afán de sacar adelante a sus familias y en
procura de un Perú libre, justo, culto y digno, saludo combativo a quienes
sufren por y para la Patria.