Informe
Señal de
Alerta-Herbert Mujica Rojas
24-7-2025
¿Experiencia para gobernar o habilidad para chorear?
https://senaldealerta.pe/experiencia-para-gobernar-o-habilidad-para-chorear/
Choro es una palabra del caló, es decir del
dialecto gitano español, que alude a “robar”. Así, “choro” es “robo” y “chori”,
“ladrón”. Incluso hay lugares donde “chorear” pasó a ser “choricear” y el
“choro” es un “chorizo”.
Como a falta de pan, buenas son las tortas, las vacas
sagradas, esos impresentables cuyas fortunas, bienes muebles e inmuebles,
viajes, medallitas y preseas ad hoc y mediocridad a prueba de balas, discurren
por la política peruana, han inventado el expediente que poseen “experiencia
para gobernar”.
La pregunta directa e imbatible es: ¿experiencia para
gobernar o habilidad para chorear?
El termómetro imbatible es el veredicto que emite el pueblo
cuando se lo llama a consulta porque -en esto Bolívar no pudo ser más acertado-
“el pueblo es más sabio que todos los sabios”.
Mostrar una supuesta experiencia para gobernar, bien merece
el cotejo con la solicitud ciudadana del voto para premiar a quienes así
argumentan y que estuvieron con las riendas gubernamentales. El deleznable
cuarto puesto que sacó Alan García, en competencia a posteriori su régimen,
dice bastante y aplana cualquier argumento.
Todos los gobiernos han ceñido sus servicios entusiastas a
la protección del capítulo económico de la Constitución de 1993 que privilegia
el capitalismo salvaje, la estabilidad jurídica por encima de sindicatos y la
gente, el apaleamiento y desalojo violento de las protestas populares, y el muy
religioso pago de todas las pérdidas en arbitrajes internacionales que, siempre
ganan las empresas foráneas con sus cómplices criollos hoy con fama de
juristas.
La falta de honestidad, de solicitud meditada y humilde de
perdón, hunde a los partidos. Sus pícaros son los de siempre; conocidos por
negociar perdones judiciales que no merecen, salvo que otros rábulas similares
son los que expiden esos certificados, porque Dios los cría y ellos se juntan.
La derecha es bruta por química natural. Desprecia al
prójimo por la pretendida superioridad exhibida en el color de la piel, el
apellido compuesto a retazos, el título nobiliario además de ridículo, soez.
Importantes personajes de la izquierda marxista y socialista
tienen sobre sí, el juicio crítico del militante común y corriente que se
enteró semanas atrás, de qué vivían sus adalides viajeros y dueños de
patrimonio en la ciudad, el campo y la playa y que se solventaba con los
odiadísimos dólares del repugnante imperialismo de the big stick.
¿Es genuina experiencia de gobierno la que cacarean los
mofletudos y avejentados cuanto que antiestéticos monigotes partidarios o es la
vulgar práctica del tráfico de influencias?
¿Por qué el pueblo no votó por ellos, en presidenciales y
parlamentarias? ¿A qué se debe que no tengan mandato ni en la más humilde
asociacion de padres de familia del colegio más modesto de cualquiera de los
más de 1500 distritos del país?.” ¿Experiencia
de gobierno o tráfico de influencias? 2-4-2025, https://tinyurl.com/27x69d3r
Las vacas sagradas
pululan en todos los clubes electorales, alias partidos políticos. Tienen
portátiles que aplauden sus monsergas y cantinelas que jamás cumplen porque
cuando ellos escuchan la palabra honestidad ¡sacan su revólver!, dignos alumnos
del nazi Goebbels.
Anhelan con angurria
fanática el escaño en diputados o senadores y desde esas localidades pretenden
continuar con el tráfico de influencias para cogollos minúsculos con parientes,
queridas, amantes o para el cultivo de un testaferrato de empresas corruptas
que saben cómo se expiden estos delincuentes.
Exponentes máximos
del anti-carisma, sospechosos de manejos jamás aclarados en sus
administraciones gubernamentales, carentes de ideas ¡siquiera de
intelectualidad cultivada o expresión política creativa!, se auto-nombran
integrantes de fórmulas presidenciales cuyo pronóstico no alcanza ni el 1%. ¡Ni
para el té!
Los supuestos renovadores imitan la voz de las vacas
sagradas, sus poses y aspectos “enriquecidos” con lentes que intelectualizan y
convierten a oportunistas en doctos y sabios de la nada.
Nunca pueden explicar aquellos, de dónde los dineros que
financian sus viajes por todo el país, el sufragio de las portátiles locales o
las que llevan consigo, los polos y banderolas.
Como es de verse, toda repetición es una ofensa. Pero lo que
no se atreven a escudriñar con meticulosa cirugía los de menos edad, es que
están ayudando a cavar la tumba de un trabajo político que llegó a la
conciencia del pueblo a la que no se arriba con oro ni con fusiles.
Los reyes ociosos de la edad media fueron echados del trono
y pagaron sus vicios y mediocridades con la exclusión absoluta en el reinado.
¡Cómo es la mía, ha sido el lema de orden de las vacas
sagradas! Dejan tras de sí el vergonzoso legado de partidos miniaturas, con
absoluto divorcio de las masas populares. El saldo no es motivo de orgullo
alguno porque su desconexión con el hombre y la mujer de la calle es un hecho
criminal.
Las palabras, los discursos oportunistas, las promesas
demagógicas se las lleva el viento. Y sus emisores son parte sucia de una
historia, nacional y popular que hay que limpiar urgentemente.
¿Experiencia para gobernar o habilidad para chorear?