Saturday, December 09, 2006

Diplomacia y debilidad mental

Señal de Alerta
por Herbert Mujica Rojas
9-12-2006

Diplomacia y debilidad mental

El Perú está notificado: el eternamente muerto que desempeña el
titularato de Torre Tagle considera que la política de Estado en el
caso de la delimitación marítima con Chile, tema inconcluso y
cobardemente declinado por este gobierno hasta hoy, es "una soplada de
pluma". Esta categoría sociológica ha sido dicha, con la autoridad
intelectual que todos "reconocemos" al señor de marras. Ahora se
explica por causa de qué Perú, albergando 5 mil millones de dólares en
inversiones chilenas, sea incapaz de sentar al país austral en una
mesa de negociaciones para poner ¡como prioridad indiscutible y número
uno! el importantísimo y patriótico límite marítimo.

Más aún. El eternamente muerto, que tuvo semanas atrás la desfachatez
de confesar que los toledistas y fujimoristas le consideraban la
"inteligencia del Apra" y que por eso había "perdido 14 años de su
vida", opina que es injusto que se reclame al gobierno de Alan García
porque discurra por los senderos de la Corte Internacional de La Haya.
Vanidad y estupidez se juntan casi siempre, produciendo aberrantes
mazamorras de increíble vulgaridad.

El ex canciller Manuel Rodríguez Cuadros ha dicho que él discrepa con
la actual orientación con respecto al diferendo marítimo. Sería
interesante que Rodríguez aclarara de qué habla, porque los huéspedes
de Palacio sólo han dicho que tratarán el diferendo marítimo "por
cuerda aparte". Esta pusilanimidad no se distingue gran cosa con la
improvisación y el apuro de que se hizo gala no ha mucho cuando se
enunció a la Corte de La Haya, como alternativa ¡precisamente! bajo el
patrocinio de Rodríguez Cuadros. No podrá negar él, y eso lo sé de
segurísima fuente, cómo es que el país no tiene la menor idea de qué
hablan sus diplomáticos, la prensa ignora el tema en su integridad y
no hay ¡siquiera! uniformidad de planteamientos porque se recurrió a
campañas traidoras y entreguistas como aquella de la adhesión peruana
a la Convención de Mar. ¿Alguien ha preguntado cuantos millones de
dólares se malgastaron en este disparate? ¿No haría mejor Rodríguez en
preparar una defensa lógica y política ante las ventiscas y nubarrones
que le presenta un horizonte borrascoso?

Si desde 1952, pasando por 1954, por los tratos durante el primer
gobierno de Belaunde, con Schwalb de protagonista por canciller, y
luego la traición aviesa de Pérez de Cuéllar cuando secretario general
que admite la existencia de un límite marítimo con Chile, barbaridad
de la que dice ahora no acordarse, el triste papel de Torre Tagle ha
sido un compendio de vergonzosas y miserables claudicaciones. No deja
de estar presente ¡qué duda cabe! la ignorancia y torpeza normales de
Allan Wagner cuando en 1985 produjo un papelón con los chilenos,
asunto que ha denunciado in extenso y sin refutación alguna, el
maestro y patriota Alfonso Benavides Correa. A posteriori el repudio
nacional de las Convenciones de Lima en que la conciencia nacional dio
acto de presencia, para terminar con el sucio acto de noviembre de
1999 cuando una pandilla de delincuentes concede el curso de acción
chileno para la pseudo aplicación final del Tratado de Lima y
Protocolo Complementario del 3 de junio de 1929. Es pertinente
recordar que Jorge Valdez y Fabián Novak Talavera están entre esos
nombres vergonzantes por proditores. Ambos hoy funcionarios de este
gobierno. Largo túnel de abyectas actitudes contra Perú, su historia,
sus mártires y su designio geopolítico que demanda hombres y no
monigotes como hoy. Y llegamos al 2006 y ¡un eternamente muerto!
confiesa al país que considera el tema marítimo con Chile como "una
soplada de pluma". ¡Qué vergüenza y qué silencio el de los "analistas,
estrategas, politólogos". Los partidos no existen, los derechos
humanos sólo son rentables cuando hay dólares. ¡Tomar a lo serio las
cosas del Perú! admonizaba con vigente razón el prócer Manuel González
Prada.

El Perú no precisa de Chile para ir al Asia. En cambio Chile sí podría
eventualmente necesitar de los grandes megapuertos peruanos con bahías
profundas y anchas y ¡mucho más baratas! Si el Brasil está atento y
hacemos las cosas bien, entonces, la conjunción con los del sur puede
lograr un intercambio que elimine los fantasmas de guerras
fratricidas. Pero para eso se requiere de hombres de acero, no muñecos
de mazapán y muertos que hablan estupideces como en los días actuales.

¡Atentos a la historia; las tribunas aplauden lo que suena bien!

¡Ataquemos al poder; el gobierno lo tiene cualquiera!

¡Hay que romper el pacto infame y tácito de hablar a media voz!

Lea www.redvoltaire.net
hcmujica.blogspot.com
Skype: hmujica