Informe
Señal de Alerta-Herbert Mujica Rojas
10-7-2023
El derecho a ser estólido
https://senaldealerta.pe/el-derecho-a-ser-estolido/
En el libro, El
derecho a ser estúpido, (Yorkshire Dungeons Editions, noviembre 2007), el
escritor Peter Arrow consigna opiniones que parecieran haberse hecho estudiando
o teniendo como objeto de una tortura semejante, a las inútiles e ignaras castas
políticas peruanas.
En nuestro país las cosas
de puro sabidas, se olvidan. Por tanto repetir y repetir, antes que una
aburrida práctica, constituye un esfuerzo para hacer trabajar las mentes.
Leamos.
“Lo que habría que hacer
es elaborar un esquema que demuela esa danza perversa de la ignorancia y la corrupción,
que es una herencia cristiana pero básicamente católica. Se equivocó, hizo mal,
pecó, coimeó, vendió hasta las joyas de la abuelita, damnificó a todo el mundo
pero ¡errare humanum est!
El catolicismo,
culturalmente, maneja el imperio de la corrupción y de la ignorancia... educan
a la gente a ser ignorante. Una evidente contradicción entre los términos”.
¡Ojalá tuviéramos una
élite, económica o ideológica, contra la cual uno pudiera enfrentarse o
someterse! En cambio los arietes brutales de arremetidas sin mayor lógica que
la usura y los intereses de grupúsculos miserables, son el gobierno y el
Congreso.
Si alguien hace daño a
alguien, por ser ignorante, tiene que ser ejecutado, sancionado. Ello aniquila
el concepto del perdón. Hasta el loco no es una definición científica sino
social... si hay muchos locos, ser medio loco es estar del lado favorable de la
estadística. ¿Puede haber un ser "más honesto" que otro? ¡Solo hay
honesto y deshonesto!
Recordemos, la ignorancia
de la ley no inhibe de su cumplimiento.
¿Qué es ignorancia?: desinformación y falta de voluntad de informarse... Si la
ignorancia fuera un derecho, la gente lucharía por hacer prevalecer su
ignorancia como sistema de vida... La verdad de la milanesa es que, por
ejemplo, los islámicos quieren imponer la ignorancia y ese es el telón de
fondo.
¡Uno es ignorante, carajo, porque quiere ser ignorante!
Perú es un país de avestruces porque todo el mundo mete la cabeza bajo tierra para
no ver lo que pasa alrededor. Ni oler la putrefacción que se percibe a
Y la corrupción continúa
con su labor depredadora y pulverizadora de un cuerpo social que existe a pesar
de las leyes, las autoridades, el Estado y todos los gobiernos.
He allí una interesante
veta a analizar con detalle escrupuloso. Seis millones de pequeños y medianos
productores sobreviven a su modo, sus finanzas y su ingenio sin tributar, a veces
careciendo hasta de locales pero llevan el pan a su casa. ¿Y el Estado? ¡Bien
gracias!
La realidad es peor que las ideas y las expectativas más perversas.
Esa es la cadena inquebrantable que arrastran los habitat históricos, no hay
free lunch, hay imposición de élites.
A los que se equivocaran
bajo el pretexto de la ignorancia, los incas los hubieran arrojado a un volcán
o hubieran creado su propio Taigeto espartano en los Andes, en la cumbre
bicéfala del Huascarán y el camino de eliminación selectiva de los más ineptos,
habría sido irrefrenable. Pero ¿qué se hace aquí? Se perdona, se otorgan bulas
firmadas –y compradas por buenos dólares o euros- para olvidar los daños y que
todo siga como siempre, de mal en peor.
En efecto, aquí lo que
quema casi siempre es “ignorado”. Todos saben que existe, pero la pusilanimidad
gigantesca de las castas políticas, intelectuales, periodísticas,
empresariales, ha firmado el conchabo infame del silencio para pretender que
los fenómenos corruptos no existen.
Aunque los procesos
judiciales, igual de sucios casi todos, sigan su curso, con las coimas
agradecidas de jueces, vocales y secretarios, el ámbito donde teóricamente se
imparte justicia tiene tarifas no escritas en dólares, euros, patrimonio
inmobiliario o cuentas cifradas en el exterior.
Conozco de estólidos que
claman porque no se hable ni denuncia la corrupción porque es un tema
“trillado”. Eso da idea de la pócima mortal que posee ese despreciable, en
lugar de cerebro.
Adelantó en su lapidario
artículo don Manuel González Prada, Los honorables:
“Porque en todas las
instituciones nacionales y en todos los ramos de la administración pública
sucede lo mismo que en el Parlamento: los reverendísimos, los excelentísimos,
los ilustrísimos y los useseñorías valen tanto como los honorables. Aquí
ninguno vive su vida verdadera, que todos hacen su papel en la gran farsa. El
sabio no es tal sabio; el rico, tal rico; el héroe, tal héroe; el católico, tal
católico; ni el librepensador, tal librepensador. Quizá los hombres no son
tales hombres ni las mujeres son tales mujeres. Sin embargo, no faltan personas
graves que toman a lo serio las cosas. ¡Tomar a lo serio cosas del Perú!
Esto no es república sino
mojiganga.”