Tuesday, March 30, 2010

¿Quien mató a Godofredo García Baca?



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From: Alfredo Grados <alfredogrados@yahoo.com>
Date: 2010/3/7
Subject: Chimu - Quien mató a Godofredo García Baca?
To: Historia del Peru <historiadelperu@yahoogroups.com>, Chimu <chimu@yahoogroups.com>, Interquorum Peru <interquorum-peru@yahoogroups.com>, Realidad Peruana <realidad_peruana@yahoogroups.com>, Respeto a la vida <respetoalavida@yahoogroups.com>, GatoEncerrado <gatoencerrado@yahoogroups.com>, Valetodo <valetodo@yahoogroups.com>, Plan_de_Gobierno_PS_DT@gruposyahoo.com, nuevo_peru@yahoogrupos.com.mx


 

Rememorando al gran luchador
¿Quién Mató a Don GODOFREDO?

Fuente: Caretas, 7 de Junio de 2001

El 31 de marzo pasado fue asesinado en la irrigación de San Lorenzo de Piura, el presidente de la Asociación de Productores de Mango y líder agrario, Godofredo García. Su violenta muerte ocurre en un contexto de creciente tensión entre los agricultores y la gran minería.

Ulises García ora ante la cruz levantada en memoria de su padre en el lugar del crimen. Derecha, don Godofredo.

Escribe MARCO ZILERI


L
A bala penetró a la cabina de la camioneta por debajo de la plumilla, rozando el marco del parabrisas y alojándose de pleno en el corazón de don Godofredo García.


-¡Me han dado en el corazón!, alcanzó a decir antes de fallecer.


Eran apenas las 9:35 de la mañana del sábado 31 de marzo pasado. Godofredo García viajaba en el asiento de copiloto de su pick-up Nissan blanca. Su hijo Ulises, 34, conducía. Ambos se dirigían a su fundo en la irrigación San Lorenzo, Piura, para pagar la planilla, sorteando los baches y aniegos que había dejado el chaparrón de la noche anterior. Sin saberlo, los García acudían a una cita con la muerte. A menos de un kilómetro del fundo, una trampa de espinas detuvo la marcha de la camioneta.


-"En eso apareció de entre la foresta una persona, con el rostro cubierto por un pasamontañas, apuntándonos con un revólver. Caminó hacia nosotros y disparó", dice Ulises, reviviendo la pesadilla.


Una mancha roja impregnó de inmediato la camisa de su padre a la altura del pecho. La silueta asesina giró hacia la ventana del copiloto, constató la muerte de don Godofredo y luego se dirigió a Ulises a gritos.


-¡Sal del auto, carajo!


A unos tres metros de distancia del cañón, Ulises, aterrado, alzó los brazos, el cuerpo crispado a la espera de un segundo balazo. Pero el criminal encapuchado no disparó.


¡Dame los 2,000 soles, carajo!, ordenó.

 

Ulises García, único testigo ocular de los hechos, reconstruye el asesinato. El criminal usaba un pasamontañas, disparó a quemarropa y luego robó


CONMOCION EN PIURA


El asesinato de Godofredo García conmocionó a Piura. A sus 65 años, García era uno de los pioneros de la irrigación San Lorenzo y uno de sus dirigentes más carismáticos. Las 90 hectáreas de frutales del fundo del entomólogo y ex catedrático de la Universidad Agraria, eran un modelo de cultivo agro-ecológico cuyas innovaciones don Godofredo y sus hijos compartían con delegaciones universitarias y especialistas agrarios nacionales y extranjeros. El suyo es uno de los 7,500 predios en las 35,000 hectáreas de la irrigación San Lorenzo que, al cabo de 40 años, se han convertido en el emporio del mango y el limón peruano, de cuya producción depende el grueso de nuestras exportaciones y nuestros cebiches: el 90 % de la exportación de mango y el 80% de la producción nacional de limón. Para muchos, San Lorenzo es el proyecto de expansión agrícola más exitoso del país. De hecho, sus 17,000 hectáreas de frutales no tienen parangón en el resto del territorio nacional.


García adquirió su fundo en 1964, cuando éste era aún un terreno eriazo a punto de ser bendecido por el agua. Desde entonces, y hasta el día de su muerte, el agricultor recorrió el camino entre la ciudad de Piura y la irrigación casi a diario.

Dra. Beatriz Paz, titular de la Primera Fiscalía Mixta de Sullana, y su adjunto, Arminio Arroba.

BOLSA NEGRA


¿Quién mató a don Godofredo García?

Los deudos de don Godofredo creen que solamente cuando se capture al asesino se sabrá por qué disparó a mansalva antes de robar, tenía el rostro cubierto, sabía en cuánto dinero consistía el botín, no se llevó la camioneta y actuó solo. La familia teme que Godofredo García haya sido asesinado por encargo. El extraño curso de las investigaciones alimentan sus sospechas. A escasas 48 horas del crimen, la Policía se apresuró a publicar un comunicado desechando la tesis de una conspiración. Hasta ese día, no había interrogado a ningún sospechoso. Los sospechosos empezarían a desfilar una semana más tarde. La conducción de la investigación por parte de la Primera Fiscalía Mixta de Sullana, a cargo de la Dra Beatriz Paz, ha estado plagada de irregularidades.


A principios de mayo, la Policía presentó un atestado acusatorio contra Meléndez Zapata Atoche, 21, un vecino del fundo de los García, con antecedentes penales. El sospechoso fue identificado por Ulises y una pequeña campesina de 13 años que afirma haberlo visto al momento de sacarse el pasamontañas, entre ocho individuos presentados por la Policía. A partir de entonces el curso de las investigaciones son dignas de Ripley. Al momento del careo, y a falta de un pasamontañas, la fiscal Paz dispuso se le colocase al sospechoso una bolsa negra de plástico para que Ulises lo reconociese. Meléndez Zapata Atoche no fue sometido entonces a la prueba de absorción atómica, que se le hizo recién veinte días después. A su vez, según denuncia la familia García, la fiscal pretendió recoger el testimonio de la menor mientras el sospechoso se paseaba libremente frente a la oficina, frustrando la indagatoria. La menor, sin embargo, ha ratificado su versión ante la Defensoría del Pueblo de Piura, que ha asumido su protección. En el transcurso de las investigaciones, el caso ha cambiado de fiscal tres veces, recayendo ahora nuevamente en manos de la Dra. Paz, quien no participó en la reconstrucción de los hechos, responsabilidad que asignó al adjunto de su despacho, Arminio Arroba. El deficiente nivel de las investigaciones fue denunciado por la familia ante el viceministro del Interior, general PNP Martín Solari de la Fuente (hermano del congresista PP Luis Solari), a principios de mayo. Sin embargo, el respaldo prometido no se ha hecho sentir. A nueve semanas del crimen el autor del disparo permanece aún impune.


Mayor PNP Carlos Rojas Ñique a cargo de las pesquisas. Al lado, El asesino encañonó a Ulises, pero no disparó.

LIDER AGRARIO


Don Godofredo García fue asesinado casi un mes después de que el campamento de la minera Manhattan en la vecina localidad de Tambogrande -el centro urbano más poblado de la irrigación San Lorenzo- fuera destruido por una turba que se opone a la explotación de un yacimiento de oro, plata, cobre y zinc ubicado debajo del pueblo.

El acto vandálico, llevado a cabo el 27 de febrero, puso al rojo vivo la tensión que existe entre la minera y los agricultores de San Lorenzo y Tambogrande, desde que en 1999 el gobierno de Alberto Fujimori autorizara a la empresa canadiense iniciar trabajos de prospección minera en la región. La minera ha presentado denuncias formales contra 45 dirigentes y pobladores agrupados en el Frente de Defensa de los Intereses de La Irrigación San Lorenzo y el Pueblo de Tambogrande, acompañadas de una alerta por parte de la Sociedad Nacional de Minería de crecientes hechos de violencia en centros mineros en el país.


La violenta muerte de don Godofredo García ha venido acompañada de oscuras amenazas sobre otros dirigentes de la región. Sin embargo, la propia minera Manhattan admite que García era un opositor leal ajeno a toda violencia. Leal, pero insistente.


Desde 1999, García, presidente de la Asociación de Productores de Mango del Perú y ex director del proyecto Chira-Piura en los años de Alan García, fue la voz cantante de la protesta agraria contra la actividad minera en cuanto foro se presentó. Defendió los méritos agrarios de San Lorenzo, subrayó la preeminencia de la agricultura sobre la minería y, últimamente, puso al descubierto gruesas inconsistencias en el estudio de línea base de impacto ambiental de la minera Manhattan. "No me opongo a la minería -decía-, sino a esa mina. A ésa y otras en la región" (ver recuadro).

Godofredo García. Sus 90 hectáreas eran un modelo de cultivo agro-ecológico.

LA MINERIA TOCA SUS PUERTAS


Veinte días antes de su asesinato, Godofredo García recibió en su fundo una carta despachada por un motociclista desde la vecina localidad de Lomas. Decía:


Sr. Ing. Godofredo García Baca.
Presidente de la Comunidad de Somate Bajo.
(...)

El motivo fundamental de esta misiva es el de poner en su conocimiento que nuestra Compañía se encuentra realizando estudios técnicos de reconocimiento geológico preliminar a lo largo del departamento de Piura, extendiéndonos incluso hacia territorio Ecuatoriano. Por tal motivo solicitamos humildemente ante usted que nos otorgue la respectiva autorización para poder realizar trabajos de mapeo y muestreo en las inmediaciones de la Comunidad.
(...)

No pretendemos causar molestias y muy por el contrario velar por el orden, tranquilidad, seguridad y protección del Medio Ambiente.
(...)

Atentamente,
Ing, Alberto Rios Carranza.
Compañía de Minas Buenaventura S.A.


-"La carta no le agradó en lo más mínimo", recuerda Ulises. De hecho, padre e hijo hablaron sobre el tema durante el fatídico trayecto al fundo el 31 de marzo. Pocos años atrás, García había logrado persuadir al Ministerio de Energía y Minas para que detuviese la explotación de una cantera -La Chancadora- ubicada a pocos kilómetros de su predio, en el corazón de la irrigación, y de la cual se abastecía de piedra Energo-Proyect. El ruido de las explosiones, el polvo y el tránsito pesado perturbaban la vida en el agro y destrozaron los caminos rurales.


Pero ahora la amenaza era mucho mayor. Piura es hoy el segundo distrito minero del país, concentrando el 50 % de las concesiones en territorio nacional. El desarrollo de las mismas compromete el futuro agrario de la irrigación San Lorenzo y de la propia Chira-Piura, bajo cuyos miles de hectáreas de frutales y arrozales dormita el precioso metal. Un dilema que ha provocado una virtual revuelta agraria en Piura, cuyos productos se resisten a esta segunda reforma agraria -impuesta por intereses mineros-, de la cual don Godofredo era uno de sus líderes más carismáticos.


Revuelta Agraria
Agricultura versus minería: el caso de Piura.

El 90 % de los limones del Perú provienen de la irrigación San Lorenzo.

LA entrega en concesión minera de 460,000 hectáreas en el departamento de Piura en el último lustro ha generado una virtual revuelta agraria en la región. El epicentro de la batalla es el distrito de Tambogrande, el núcleo urbano más grande de la irrigación San Lorenzo, con 25,000 habitantes. Las calles rojas de Tambogrande evidencian la presencia de minerales a flor de piel. De hecho, su potencial minero fue advertido en 1868 por el propio Antonio Raimondi, quien sospechó que se trataba de hierro.


Sin embargo, los trabajos de prospección minera desarrollados en los últimos dos años por la empresa Manhattan, han identificado aquí (TG1) 56 millones de toneladas de mineral, 9 millones de los cuales corresponderían a oro y plata, y el resto a cobre y zinc. Su explotación implica el desarrollo de un tajo abierto sobre 400 hectáreas del actual pueblo, y de 300 metros de profundidad. La minera -que tiene previsto invertir US$ 300 millones- contempla reubicar la población afectada y crear 400 puestos de empleos directos y otros 2,500 indirectos.


A su vez, en otro yacimiento cercano, al que se denomina TG3, existirían sepultadas 86 millones de toneladas de cobre y zinc. Y a once kilómetros de esta localidad, un tercer yacimiento (el B5) sería tres veces más grande que los dos yacimientos previos, informa la empresa.


La minera Manhattan compró por US$ 23 millones los derechos sobre el yacimiento a la francesa BRGM en 1998, y en 1999 obtuvo del gobierno de Alberto Fujimori el permiso para iniciar sus pesquisas sobre 66,000 hectáreas. Desde entonces, la tensión entre la compañía minera y la población de Tambogrande han ido en aumento. El 27 de febrero pasado, estalló. A consecuencia de un paro convocado por el Frente de Intereses de la Irrigación de San Lorenzo y el pueblo de Tambogrande -severamente reprimida por la Policía-, el campamento de la minera fue reducido a cenizas por una turba.

El pueblo de Tambogrande y la superposición de yacimientos mineros.Derecha, campamento arrasado de la Manhattan el 27 de febrero

Los tambograndinos son reacios a la explotación de la mina en su pueblo desde 1982, cuando el entonces ministro de Energía y Minas, Pedro Pablo Kuczynski, llegó en helicóptero a la localidad para suscribir con la BRGM el contrato de explotación, siendo recibido a pedradas. En el año 2000, el entonces ministro de Energí y Minas de Fujimori, Chamot, quien también había llegado en helicóptero, corrió la misma suerte.


El grueso de los 25,000 habitantes de Tambogrande vive de la agricultura que se desarrolla en la irrigación de San Lorenzo, que consta de 35,000 hectáreas, de las cuales 17,000 están dedicadas al cultivo de frutales, siendo de lejos el principal productor de mango para la exportación y limones para el mercado interno.

Si bien el área concesionada a Manhattan no compromete la irrigación, restan aproximadamente 400,000 hectáreas entregadas a una decena de importantes empresas como Buenaventura y Arias, entre otras, que sí comprometen irrigaciones como las de San Lorenzo y Chira-Piura. Los agricultores que se oponen al desarrollo minero cuestionan que el Estado le dé prioridad a la actividad minera en áreas en las cuales el erario nacional invirtió en el transcurso de las últimos 40 años centenares de millones de dólares para ampliar la frontera agrícola, y de cuyos frutos, sostenibles en el tiempo, se tiene legítimo orgullo.


Oscuras Amenazas

Dirigentes del Frente de Defensa denuncian graves amenazas.

F. Ojeda en Aprodeh. Amenazaron a su hija

EL miércoles 23 de mayo a las 7 de la noche, la hija del presidente del Frente de Defensa de los Intereses de la Irrigación San Lorenzo y el Pueblo de Tambogrande, Francisco Ojeda Riofrío, fue secuestrada al paso en Piura, por ocho sujetos -uno de los cuales portaba un arma blanca- y amenazada de muerte.


-Tú eres Ana, hija de Pancho, le dijeron sus agresores. Sabemos dónde vives, con quién andas. "Sabemos todo de ti. Dile a tu padre que le vamos a dar donde más le duele. Cuiden a tu sobrino".


Ana Ojeda, 17, fue interceptada a la salida de la Universidad César Vallejo y rodeada por el grupo que la obligó a caminar por la céntrica Av. Sánchez Cerro, seis cuadras antes de ser liberada. Los agresores abrieron su mochila, rompieron sus cuadernos y se llevaron su celular, pero no le robaron otros objetos de valor.


"Se trata de un evidente caso de amedrentamiento", sostiene Alejandro Silva, abogado de la Diaconía para la Justicia y la Paz del Arzobispado de Piura. "Y éste no es un caso aislado". Según el Dr. Silva, la familia Ojeda ha sido víctima de acoso desde el año pasado.


El caso ha sido denunciado ante la Fiscalía de Piura y se ha solicitado una medida cautelar ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos. A su vez, se han solicitado acciones urgentes ante Amnistía Internacional. Según la Diaconía del Arzobispado de Piura, familiares de otros dirigentes del Frente también han sido amenazados. El último caso denunciado fue el de la esposa de Segundo Moreno, un profesor de Tambogrande.

 


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Actividad reciente:
CHIMÚ, LISTA CULTURAL ALREDEDOR DEL MUNDO



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Atuendo y género

Los libros, mis amigos

 

Atuendo y género

por Luis A. Pacheco Mandujano; luisitopacheco@hotmail.com

http://www.voltairenet.org/article164740.html

marzo 2010

 

La mañana de ese día se había iniciado con una marcada sensación de intranquilidad para todos los habitantes de San Juan, un pequeño, aunque acogedor, pueblecito de la costa norte. Nadie sabía por qué, pero todos llevaban en sí un extraño sentimiento de intranquilidad.

 

A pesar de esta rareza, nadie olvidó que por la tarde la función de matinée –única por entonces– del circo visitante comenzaría a las cuatro.  Era una especie de "sacada de vuelta" a la mala impresión que reinaba ese día en el ambiente, lo que evitaba respirar con tranquilidad. Además, en este circo (que por disposición del alcalde sanjuanero se erguía modesto, pero con buen aspecto y llamativa imagen, algo alejado de la comunidad) se ofrecía entretenimiento asegurado por la calidad y novedad de su presentación. Mas de entre todos los números, resaltaba el arte histriónico y elocuente de la payasa del circo: una mujer que parecía llevar en sí la síntesis de todas las mujeres y de ninguna a la vez, pero que trabajaba en ese oficio con pasión desde hacía buenos años. Su espectáculo era nada común. Primero por tratarse de una mujer encarnando y segundo por el mensaje de su escena: jocosa, pero de contenido realista y, sobre todo, moral. Esto gustaba a la gente. Los alejaba, aunque sea por unos momentos, de los diarios problemas, de la realidad del campo y sus vicisitudes. Y así como los hacía reír, también los hacía reflexionar.

 

Nadie sabe hasta hoy qué pasó, pero una media hora antes del inicio de la función, el circo fue hecho presa del fuego. Preocupado por el avance de las llamas por los pastizales secos del campo que se extendían hasta la comunidad, el dueño del circo envió al pueblo a su famosa payasa, que ya estaba lista para la actuación, a pedir auxilio.

 

Una vez que llegó allá para cumplir su cometido, la payasa gritaba "¡Auxilio! ¡Auxilio...! ¡El circo se quema y el fuego avanza por los pastizales...!". Pero los pobladores creyeron que se trataba de un espectacular truco para lograr que más gente asistiera a la función que estaba a punto de empezar. Se reían y hasta aplaudían a la payasa, mientras ella se desgañitaba cada vez más y, entrando en pánico, agudizaba su pedido de auxilio acompañada ahora de llanto, intentando explicar que no era broma lo que ella decía, que esto era serio y que necesitaba la ayuda de todos. Pero seguían sin escucharla.

 

Para cuando los pobladores reaccionaron, toda acción fue en vano, porque, así como el circo, el mismo pueblo fue devorado por el incendio. Nada se pudo hacer. Pudo más el atuendo y la condición de ser mujer.