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From: Estado Laico <estadolaicoperu@gmail.com>
Date: 2011/2/3
Subject: El Sodalicio de verdad (parte I) JEES
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From: Estado Laico <estadolaicoperu@gmail.com>
Date: 2011/2/3
Subject: El Sodalicio de verdad (parte I) JEES
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El Sodalicio de verdad (parte I)
Foto: lamula.pe |
Ayer publiqué un post que ha dado mucho que hablar. Y mentiría si dijera que eso no es lo que quería. Claro que quiero eso. Pero no por las razones que mis atacantes han esgrimido en sus comentarios y tweets, sino porque miles de adolescentes y sus padres deben saber que el Sodalicio de Vida Cristiana o SCV no es una cofradía de santos vivientes intocables y que Germán Doig y el pedófilo Daniel Murguía no son paja en medio del trigo puro y cristalino de estos autoproclamados "soldados de Cristo".
Germán Doig estaba destinado a ser el delfín de Luis Fernando Figari, el fundador, inspirador, ideólogo y conductor del SCV. Era quien estaba siendo entrenado personalmente por Figari para que lo reemplazara ante cualquier eventualidad. El desastre sobrevino cuando la eventualidad se volteó hace diez años y Doig murió antes que Figari. ¿La solución para que el SCV no se quedara en la oscuridad de la desesperanza? Intentar que Germán fuera canonizado. Sin embargo, en el proceso previo, la beatificación, se dieron con la sorpresa de que Doig no era ningún santo y que los testimonios de los afectados por sus conductas impropias eran fehacientes, incuestionables e insobornables. Y, ante la posibilidad de que esto se conociera por otras vías y destruyera las entrañas del Sodalicio, decidieron ellos mismos hacer pública la decisión de detener el culto a Germán y de arrojar a su otrora "Apóstol de la Nueva Evangelización" a la hoguera de la condena social, una hoguera que no debía tocarlos. Y menos a Luis Fernando, el maestro y guía de Germán, el único que les garantizará en el futuro tener un santo para darle la solidez que todo grupo de esta naturaleza busca para perpetuarse y ganar poder dentro y fuera de la Iglesia Católica.
Si creen que tengo un interés distinto al de advertir a padres, maestros, jóvenes, autoridades y a la sociedad en general sobre lo que verdaderamente pasa dentro de las paredes del Sodalicio, entonces créanlo. Yo sé lo que quiero conseguir en esta batalla y eso me basta. Ya me he enfrentado a ellos y a sus mastines hace años y esta vez lo vuelvo a hacer porque creo en esta lucha, creo en lo que vi estando dentro y creo que ellos mienten descaradamente cuando lo silencian, minimizan o lo niegan.
Un tema adicional: Las "amenazas" publicadas ayer por anónimos en mi blog son solo anécdotas para mí. No sé si serán ellos ni me interesa, eso lo definirán las investigaciones policiales que ya se iniciaron esta mañana. Eso es secundario. Y si me querellan por lo que escribo acá o por lo que declaro a los medios, que me querellen. Lo más importante es que quienes lean lo que escribo sepan que Germán Doig no es la manzana podrida con la que nos quieren atragantar para que no veamos a las serpientes que desenvainan la espada flamígera que eligieron como símbolo.
El volver a difundir lo que publiqué hace diez años tiene una sola meta: que mis lectores sepan lo que vi, lo que escuché y lo que me obligaron a hacer no algunos "humanos pecadores como todos" sino la cúpula organizada de una institución creada para manipular mentes jóvenes y usarlas para oscuros fines disfrazados de santidad.
Germán Doig está muerto y hoy sus seguidores del SCV no han dudado en matarlo por segunda vez, usando su cadáver como escudo para esconder sus propias asquerosidades, sus aires de superioridad y sus ansias de poder.
Lo que publiqué hace años y vuelvo a publicar hoy es para que TÚ sepas que tus hijos, hermanos o amigos, que seguramente se han acercado al SCV con el sincero deseo de ser santos o simplemente mejores, están en serio peligro. El problema no fue Germán Doig, el problema ES la cúpula del Sodalicio, que se aprovecha de la confianza que en ellos han puesto miles de jóvenes que, como yo lo hice hace más de veinte años, creen en su enmascarada sinceridad.
Agradezco los cientos de mensajes de respaldo que he recibido desde que publiqué mi primer post. Sin temor, porque sé que digo la verdad, seguiré publicando lo que sé.
Los dejo con mi segundo artículo. Recuerden que fueron publicados en una revista semanal, por ello el manejo del tiempo. En este blog los estoy publicando día tras día. Esperen el tercero mañana.
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