Friday, June 01, 2007

Periodismo: ¡ni soplonaje ni racismo!

Señal de Alerta
por Herbert Mujica Rojas
1-6-2007

Periodismo: ¡ni soplonaje ni racismo!

La pseudo-reportera del noticiero Primera Edición de Canal 4,
"pregunta" a una comerciante desalojada de Santa Anita: "¿va a volver
a su pueblo?". La empresaria popular, que eso son aquellos hombres y
mujeres que estuvieron en esa zona y ya no están, respondió azorada
por la agresión y dio su negativa. Los compatricios de Santa Anita son
peruanos, pero algún tristísimo y mediocre jefe o jefa de redacción
envía a su también muy triste aprendiz de periodismo, a inquirir una
desfachatez. ¡El periodismo no es soplonaje ni racismo!

Otra comerciante fue seguida hasta el paradero en que habitualmente
toma la movilidad que le lleva a casa. Luego el camarógrafo, que
también recibe órdenes, enfoca la vivienda y, para placer de todos los
cacos, muchos de los cuales también ven televisión en busca de
"clientes objetivos" se apercibe que hay viruta. La pseudo-reportera
pretende comunicar al público que el ex inquilino de Santa Anita no es
un menesteroso y sucio marginal que "ofendía" con su presencia un
mandato judicial sino que es un rico embozado y disfrazado de humilde.
¿Qué ocurrirá mañana si aquél, visto en cámaras, es raptado o
violentado o agredido por malandrines por el único delito de poseer lo
que todos aspiran, una casa donde habitar?

Nótese que la cuadrilla que se precia de ser avanzada periodística de
un matutino de prestigio con personas de la talla de Federico Salazar
y Verónica Linares, con vasta experiencia, hace lo que no puede hacer
la policía ¡y sin mandato judicial! ¿Por causa de qué persiguen a los
empresarios populares y les exponen de este modo tan irresponsable y
criminal?

Verifícase en la joven que hacía –o pretendía- hacer "preguntas", un
sentimiento soterrado despreciativo e injustificable. ¿Por causa de
qué la señora tendría que volver a su pueblo? ¿no es esa una decisión
íntima que sólo podría responder a coyunturas ajenas a cualquier
programa televisivo o decisión judicial, comercial o política? La
verdad es que para la pseudo-reportera –que debería ser echada sin
miramientos de ese espacio noticioso- los comerciantes son apestados y
quechuahablantes que deben volver a sus lugares de origen porque en la
capital no encuentran su destino. La pregunta es inequívoca y
terminante y la respuesta que esperaba la ignara es desopilante.
Parece olvidar que esta gente, compatricia tan o mas peruana que todos
los impostados o peruanos bamba, ha batallado y peleado centímetro a
centímetro por lograr cuanto tiene. Si entre ellos hay hampones, eso
no sería raro porque la casta abunda en la sociedad peruana, de arriba
a abajo, con la diferencia que a los de arriba se les dice señores y a
los de abajo se los engrilleta y apalea inmisericordemente. Y unos son
tan ladrones como los otros.

¿Es esta la televisión democrática de la que se "enorgullecen" los
dueños de canales? Si un evento es silenciado en la televisión,
entonces, oficialmente, no existe. Hay ministras, caso puntual de
Verónica –la de los US$ 5 millones- Zavala, cuyas travesuras con
dinero del pueblo, han sido encontradas como irregulares y pasibles de
acusación penal, pero ella sigue en el titularato de Transportes como
si nada pasara y la prensa ¡bien gracias! ¡no dice nada! Cierto que
normal que los cacos sean líderes y ocupen puestos de alta
responsabilidad. Pero, si se trata de empresarios populares,
comerciantes y, peor si su origen es provinciano, entonces se les
trata como ciudadanos de tercera o cuarta categoría, como a apestados,
como a sub-humanos. ¡Qué estulticia la ambiente!

El periodismo no puede ser soplonaje rastrero que expone a la
ciudadanía impunemente y tampoco arma racista que destaca el folklore
o la dinámica vernacular o la del pueblo y su ritmo chicha ¡sólo
cuando uno de sus exponentes sufre muerte trágica! Si no es así,
entonces, simple y llanamente ¡no existen! Bien harían los del Canal 4
en botar a los ineptos que mandan preguntar barbaridades. ¡Un
espectáculo degradante!

¡Atentos a la historia; las tribunas aplauden lo que suena bien!

¡Ataquemos al poder; el gobierno lo tiene cualquiera!

¡Hay que romper el pacto infame y tácito de hablar a media voz!

¡Sólo el talento salvará al Perú!

Lea www.redvoltaire.net
hcmujica.blogspot.com
Skype: hmujica

4 comments:

olga said...

Yo estoy de acuerdo con el desalojo de los comerciantes de Santa Anita y no es cuestion de racismo sino de respeto!!! la gente no puede ni debe invadir pasando por pobre y provinciana, viviendo gratis a costa de otros que si pagamos impuestos... si usted se considera el protector de esos comerciantes muy vivos para la criollada entonces permita que invadan su casa, su calle y tambien su blog, que le parece?...

Herbert Mujica Rojas said...

Apreciada Olga:

Creo que usted entendió mal el artículo. Critico la necedad de la reportera que discurre por avenidas bobas y necias. Su conclusión es sumamente lamentable. Cuando habla de invasión del blog, no sé si se refiere a usted misma porque ha puesto un texto muy ocioso. Lo de pobre no equivale a provinciano ni viceversa. Aquí en Lima, el 80% de sus habitantes reconoce origen en las provincias. ¿O no? Que hay comerciantes que son delincuentes ¿quién puede dudarlo? De allí a poner en boca mía, cosas que no he dicho, ni jamás diría, hay una distancia sideral. Ruégole más paciencia en la lectura y cuidado en sus interpretaciones que, como en este caso, son muy antojadizas. herbert mujica rojas

olga said...

la invasion y desalojo de Santa Anita actualmente es materia de muchos debates y trabajos para estudiantes lamentablemente su opinion solo enfoca un angulo, muy romantico, muy sesgado y no deja opcion mayor comentario... lamentable.

Herbert Mujica Rojas said...

Lo divertido, apreciada Olga, es que usted me habla de un tema viejísimo, ya superado por la acción policial, en que, felizmente, no hubo mayor violencia ni víctimas. De manera que ignoro bien a qué se refiere porque si se trata de lectura sesgada, la suya, es posiblemente la única que ha distorsionado lo que yo he dicho, texto que sigo suscribiendo, desde el comienzo hasta el fin, habida cuenta que es un suceso muy lejano ya y para nada vigente. No es bueno echar la responsabilidad de sus miopías a quienes sí estamos en el debate diario, con argumentos y lógica que no debiera permitir salirse de los marcos para aventurar opiniones sin mayor sustento. Frivolidad conocida es atribuir a otros, errores que, como en este caso, usted no admite aunque sabe bastante bien que se ha equivocado, no sólo por la fecha sino también por su inexactitud. Sin embargo, yo estoy cierto que usted puede opinar y seguir haciéndolo. NO me atrevería a cerrar, como usted lo hace, un debate. Sólo sugeriría que lo traiga al presente. Mis respetos,herbert